ASESINO

Hoy tengo fuerzas, pedazo de cabrón, las suficientes como para decirte que dejas de ser humano a mis ojos, que el sentido de la piedad se reconvierte en odio y te deseo que nunca jamás sientas el aliento y el apoyo que de pequeño sentiste cuando tu madre te acariciaba al sentir miedo o la ternura del momento en el que te diste un golpe y te lo curaba. Hoy, que ya ha pasado, no siento el más minimo pudor en llamarte despropósito, en querer y desear que sientas el dolor que la familia de Marta siente, no te voy a desear que te ocurra, eso me convertiría en tu igual, pero si que sientas el vacío de la perdida de un ser querido. Has despertado la ira de quienes sienten el amor y el respeto hacia el prójimo, pero pasará y la herida se hará más profunda cuando en tus venas en las que corre esa fria sangre que te caracteriza, perciban la indiferencia. Ya no eres nadie, has dejado de serlo y ese va a ser tu peor castigo. Hoy, maldito, te escribo desde las entrañas, como madre, como mujer, pero, por encima de todo, como persona.
No va a pasar un dia en el que te arrepientas. Gentuza como tu mata un poco de todos nosotros. Mugre.
Asesino