CONFUSIÓN

Me confunde la gente, me confunden las personas que dicen ser una cosa y actuan de forma totalmente contraria. Que la contradicción forma parte de nosostros es evidente ,pero esta misma castiga a los confundidos haciendo de si mismos la apologia de lo absurdo. Me compadezco de aquellos que no han sabido olvidar y hablan de la poca importancia que ha tenido su pasado, llenándose la boca con palabras que dejan su indiferencia en duda, que intentan mostrar la cara bonita, que se hacen los sordos y apuran el oido a lo más fino, que se hacen los ciegos y ven con la capacidad de cuatro ojos. Me confunden y me cabrean, sobre todo porque no hay nada malo en decir lo que uno siente en cada momento.Me confunde la gente que se miente y que se cuenta historias que ni siquiera se creerían aun siendo reales. Estoy confundida ante aquellos que pretenden hacerse los fuertes por miedo a mostrar debilidad. Una ha estado confundida miles de veces, miles. Tantas que con el tesón de una bestia parda ha pretendido dar a entender que no sentía colocándose esa falsa armadura que a todos alguna vez nos ha dado por colocar y que tiende a eso, a lo dicho, a la absoluta confusión. Dejemos de confundirnos y si hoy lloro porque tengo la regla y mi sensibilidad se encuentra a flor de piel, tengo el vientre hinchado y me duelen los pechos como a cualquier otra mujer, que si me llamas tonta me va sentar como un tiro y que si me dices loca es probable tenga tentación de tirarte la vajilla, no voy a confundir. Que si algún dia siento que un gilipollas me toca la moral lo haré ver y que no se puede estar toda la vida fingiendo lo que una no es, no es mi caso, pero que los dias duros de esos en los que no hay fuerza para hablar y apetece comerse una tableta de chocolate con leche, del graso, del que aporta más calorias que la propia vaca morada de un conocido anuncio podría resistir en su compacta figura, pues se hace y punto. Que no hay que confundir ni confundirse, habrá que aprender a no cortarse en los momentos en los que también apetece mandarse a unos mismo a la mierda y luego volver como si nada hubiera pasado. Que aqui lloramos todos y todos pensamos alguna vez en el " qué hubiera pasado o pasará" esos tipicos instantes en los que nos regocijamos en lo que mas nos gusta e incluso duele. Que todos tenemos nuestros puntos locos. Quien lo niegue, miente como bellaco. Quien esté libre de pecado.. ya se sabe. ¿ Alguien se atreve?

" Confusión" de Celia Crespo.